Hace muchos años no usaba mi DVD, y por mi regreso al
estudio debí buscar de nuevo películas, libros, y por momentos de la vida falló
el internet.
Volví a usar los minutos de mi teléfono para comunicarme con
mi familia, esta vez no funcionó whattapp y la mensajería de Facebook, volví a
reconocer el tono de voz de mi hermano y mi madre cuando algo les preocupa,
volví a ver por la calle a la gente caminar sin estar observando de reojo su
camino , más su atención en su teléfono móvil, ver cómo el tendero se esfuerza
por empacar bien los huevos y la leche , volver a descubrir el feliz año
mirando el rostro de la persona que le habla.
Escuchar cómo las personas le preguntan al chofer para dónde
va, y si la ruta les acerca a un lugar, usar los audífonos para activar el fm
de los radios para escuchar música, buscar de nuevo los contactos de los amigos
para hablar y comentar qué se haría sin internet.
Volver a tomar la mano de la pareja porque el teléfono móvil
no está en ella.
Volver a conversar mirando la cara y no una pantalla.